Con la llegada del otoño volvemos a las comidas calientes, la llegada de las lluvias y el frío hacen estos platos más apetecibles. Así, disfrutaremos en la mesa de un buen puchero, de los platos de cucharas y de las setas.
Tenemos muchos alimentos típicos de esta estación del año, como las castañas y las nueces, que son frutos secos con muchos beneficios y los podemos comer sólo o acompañados en recetas.
Las castañas son muy saludables, poseen mucho calcio, fósforo y magnesio que nos ayudan en nuestro sistema óseo. Es rico en vitaminas B y muy saludable para personas con diabetes, la proteína vegetal de la castaña contiene todos los aminoácidos esenciales y grasas muy saludables.
Las nueces nos aportan una gran cantidad de antioxidantes, los cuales benefician nuestras células, ayudándonos a prevenir enfermedades neurodegenerativas, nos aportan ácidos grasos poliinsaturados, acido fólico y magnesio. Así, el consumo de estos alimentos nos ayuda a reducir el colesterol en la sangre.
