Como podrás imaginar, la piel de los mayores requiere una atención especial sobre todo en verano. Por ello, es importante que tomemos ciertas precauciones, ya que la piel de nuestros mayores se vuelve más delgada y frágil, perdiendo así grasa y dando lugar a las arrugas.
En la calidad de nuestra piel influyen los cuidados que hayamos tenido a lo largo de todo nuestra vida, por ello se dice que la piel tiene memoria. Así, dependiendo de este cuidado, el envejecimiento de nuestra piel puede ser más o menos evidente.
CUIDADOS QUE DEBES TENER EN CUENTA
Cuida la hidratación. La hidratación es fundamental para cuidar la piel, así que debes consumir al menos 2 litros de agua.
Cuida la alimentación. En esta época del año es primordial aumentar el consumo de frutas y verduras, ya que aportará una mayor hidratación.
Precaución con el sol. Al protegerte del sol reduces las posibilidades de desarrollar un melanoma. Apuesta por prendas de colores claros y tejidos como el algodón y busca siempre que sea posible caminar por la sombra.
Deja el tabaco. el tabaco tiene muchos perjuicios para la salud y para la piel también, como la sequedad, las arrugas y manchas.
CÓMO PROTEGER LA PIEL
Cuida la higiene. Es importante prestar atención a la higiene en verano, ya que aumenta el sudor, y las arrugas o la escasa movilidad pueden afectar a una correcta higiene. Apuesta por jabones respetuosos con el ph de la piel y que aporten hidratación.
Uso de cremas y lociones. Refuerza el cuidado de la piel con cremas de rápida absorción para que al aplicarla no tengas que frotar, produciendo una dolencia aún mayor.
Uso de protección solar. Antes de salir a la calle, no olvides usar protección solar y renovarla cada cierto tiempo. Evita, siempre que puedas, salir en las horas de mayor exposición, entre las 12h y las 16h.
